"La divertida aventura de una pequeña bola de alquitrán"
Gish sorprende como videojuego de plataformas por las físicas del personaje principal, una especie de bola formada íntegramente por alquitrán cuyo único objetivo es el mismo que tienen los protagonistas de otros títulos del género: rescatar a la pareja que ha caído en las garras de un malvado villano.
Las acciones a realizar en el juego no solo se resumen en moverte y saltar, sino que la mecánica va más allá invitándote a pegarte a diversos muros, deslizarte por pequeños huecos e incluso mostrar una actitud de pocos amigos, así como recolectar las monedas gracias a las cuales aumentará tu puntuación.
Dichos elementos se encuentran esparcidos en alcantarillas bastante variadas que albergan diversos caminos para que en Gish no todo sea avanzar sin pensar.